La sanducera Irina Fornio se desarrolla como veterinaria del equipo de Polo de la hija del Jeque de Dubai
Por Manuela Bonhomme
Irina Fornio es veterinaria y oriunda de Paysandú, cuando terminó los estudios en Montevideo y volvió a la heroica se dedicó a la producción de ganado. De a poco fue formándose en los caballos. Primero un posgrado en Brasil y después cursos en Argentina.
Hasta el momento, el cuidado de caballos de Polo no estaba en sus planes. No fue hasta 2016 que una colega “le paso” el trabajo y emprendió con caballos y equipos de Polo en Argentina.
Hace tres años, Lucas Monteverde -reconocido polista argentino- la invitó a formar parte de un equipo de Polo en Dubai, con un poco de duda al principio, Irina pasó a formar parte de la organización de Sheikha Maitha bint Mohammed bin Rashid al Maktoum, la hija del Jeque de Dubai.
“Yo nunca había visto ningún caballo de Polo en mi vida” cuenta Irina, que ya va por la tercera temporada en los Emiratos Arabe. Los campeonatos se disputan de enero a marzo y de junio a agosto en Inglaterra. En el medio el equipo descansa, los caballos se largan al campo y la uruguaya vuelve a los hipódromos nacionales.
En la vida de la doctora hay muchos caballos, es gran admiradora del Hipódromo de San Félix en Paysandú, al que concurre todos los días, acompaña también caballos de carreras en Mercedes y Maroñas, y cuarto de milla en Artigas. “De la misma forma que reviso un caballo en Dubai lo hago acá” afirma.
La primera vez
Pese a las primeras dudas, Irina decidió que despegará del país, “el uruguayo tiene el camino más allanado en ese sentido” cuenta, por que cuando llegó se dio cuenta que no está tan lejos de la realidad y que tenía muchos conocidos.
Cree que la soledad fue lo que más le costó, aún así reflexiona: “tenés la cabeza puesta en que ahí estás para crecer profesionalmente o económicamente o lo que fuera, eso queda en un segundo lado, los meses se te pasan rápido”.
Su novio la visitó la primera temporada, y la segunda ya se fueron juntos. Actualmente trabajan en la misma organización. “Es más fácil de a dos. Es sentirme más acompañada, más en casa” cuenta.
Comparando con la primera partida a estudiar a Montevideo a la Facultad de Veterinaria dice que le costó más, “obviamente era mucho peor, estaba acá a cuatro horas y me parecía que me iba a un mundo que nada que ver”.
Hoy a Irina viajar no le pesa, es experta en armar y desarmar valijas, de invierno y de verano, y siempre con el dulce de leche y la yerba. También cree fielmente que “a los jóvenes el mundo nos quedó más chico”.
A la hora de trabajar
La doctora trabaja en conjunto con dos veterinarios, en Dubai la acompaña Rodrigo Coloquiano, un colombiano que hace diez años está en los Emiratos Árabes. “Para mi es un crack, un referente” cuenta. Estando en Uruguay siguen en contacto y muchas veces le consulta los casos. Él también trabaja con caballos de Enduro, disciplina en la que se desarrollan muchos uruguayos en los Emiratos Árabes. En la temporada de Inglaterra la acompaña el veterinario Murray.
En el TEAM UAE de la Sheika son 40 personas, entre ellos los dos veterinarios, tres polistas y la Sheika, dueña, organizadora y jugadora del equipo. En la organización la acompaña Lucas Monteverde. Irina resalta que está “todo muy bien armado” en referencia a la organización, “cuando te topas con gente que hace todo muy bien y hay recursos para hacer todo muy bien, es más fácil”.
La veterinaria está a cargo de los 70 caballos de Polo de Sheika Mahita, en su mayoría son caballos llevados de Argentina. Actualmente son la mejor cría de polo del mundo. “El caballo de polo es una línea de caballo puro, una línea compacta, más firme. Entre un cuarto de milla, un puro y criollos. Los equinos deben ser muy ágiles, muy resistentes, dóciles, deben hacer todo bien, tienen que correr, parar girar, volver. Toda la disciplina en una” explica.
El intercambio cultural
“Agradezco que fui con un grupo de argentinos” cuenta, haciendo referencia al choque cultural. “Es un placer que sean tan parecidos a nosotros, me sentaba a tomar mate y no pasa nada, hablamos el mismo idioma”, añade.
En cuanto al trabajo, dice que no se sufre tanto, la Sheika “hace un esfuerzo para entender”, y eso para Irina “es un placer”.
Si bien no tiene relación con muchos árabes, cuenta que son personas serias y que inspiran respeto. En la organización, además de los argentinos, hay hindúes y pakistaníes.
El mercado de los caballos hace mucho tiempo se abrió para los uruguayos en Dubai, el Enduro se lleva a la mayoría veterinarios, vareadores y jockeys. Aun así la relación no es frecuente porque las disciplinas tienen distintos ritmos y se desarrollan en diferentes zonas. El Enduro, las carreras en el desierto y el Polo - que aún no es tan famoso en Emiratos- en el centro.
Este año, por el cruce de fronteras por el Covid-19 Irina quedó varada en Dubai, “sin mate, yerba ni termo, una situación insostenible” pudo alojarse los últimos días en la casa de un grupo de compatriotas “fueron mi salvación” cuenta.
El Polo en Uruguay
Punta del Este y Young son los centros del Polo en Uruguay, es un deporte poco conocido y practicado, por su alto costo.
“Ojalá surja algo interesante porque es un deporte que lleva mucha gente y mucho trabajo”, comenta Irina, quien cree que el potencial de los caballos uruguayos y de su gente puede abrirse a un gran mercado exterior. Ella cree que se debe “pulir un poco más”.
El Polo fue la disciplina ecuestre que menos suspensiones tuvo en este tiempo de pandemia, ya que aún no concentra a tantas multitudes.
A finales de diciembre Irina vuelve a partir a una nueva temporada de Polo, su incentivo para viajar sigue siendo el cariño hacia su equipo y el adquirir conocimientos nuevos. “No sé si quedarme en Uruguay me podría haber abierto las puertas que me abrió Dubai” reflexiona, siente que todo lo aprendido le permitió desarrollarse en las disciplinas hípicas en nuestro país. Si bien es económicamente rentable, en la balanza pesa más el desarrollo profesional que “no tiene número”.